«Extraña manera de consolar, la de recordar las penas olvidadas; colocar el corazón en
presencia de todas sus amarguras, cuando apenas puede soportar una sola». Pero
reflexiónese qué males bastante peligrosos para aumentar a pesar de los
remedios, se curan con los medicamentos contrarios. Voy, pues, a rodear tu dolor
de todos sus lutos, de todo su lúgubre aparato; esto no será aplicar calmantes,
sino el hierro y el fuego.
La consolación a Helvia - Séneca
Imagen: La muerte de Séneca de Manuel Dominguez Sanchez
No hay comentarios:
Publicar un comentario